A
partir de la Teoría Sociocultural de Vygotsky donde se plantea que el
desarrollo y
el
aprendizaje no son una construcción individual, sino que fundamentalmente se
trataba de un producto de la participación social vinculado al uso de
herramientas culturales, y cómo estas herramientas permiten la mediación de la
actividad intelectual. Entre estas herramientas de mediación podría definirse
al computador y los demás elementos asociados a la tecnología digital, los
cuales permiten crear diferentes contextos de interacción, que le brindan al
alumno la oportunidad de apropiarse de conocimiento y desarrollar habilidades
asociadas a la participación social alrededor de las mismas. (Newman, Griffin y
Cole, 1989).
El paradigma
sociocultural introduce un nuevo término denominado “comunidades de práctica”
para referirse a la “participación en un sistema de actividades en el que los
participantes comparten comprensiones acerca de lo que están haciendo y de lo
que esto significa en sus vidas y para sus comunidades” Lave y Wenger (1991:
98).
De esta manera,
los participantes de una comunidad utilizan su experiencia común para crear
entendimiento mutuo y desarrollar conocimiento. En estas comunidades, los
nuevos miembros (aprendices) son entrenados por otros más experimentados
(expertos) en un proceso de participación legítima que comienza en la periferia
del grupo y conforme los aprendices incrementan la apropiación y maestría de
herramientas culturales, su membresía y posición social se vuelve más y más
central en la comunidad.
Con este nuevo
concepto de comunidades de práctica y el gran auge y uso de las TIC han dado
lugar a la emergencia de comunidades virtuales, en las cuales, de manera
similar a otras comunidades, el lenguaje, la participación social, y la
apropiación de herramientas culturales desempeñan un papel central en la
construcción de conocimiento y de las identidades de los participantes. Esta
forma de estudiar el aprendizaje forma también parte de los principios del
paradigma sociocultural.
El paradigma
sociocultural ha sido muy influyente en los últimos años en el surgimiento de
nuevas pedagogías centradas en la participación social, el estudio del lenguaje
como herramienta clave en la construcción social del conocimiento, el uso
extensivo de dinámicas de trabajo en equipo, y la investigación centrada en el
uso de las TIC para configurar contextos educativos distintos al aula tradicional,
como lo es la educación a distancia y la creación de comunidades de aprendizaje
en escenarios educativos innovadores.
El rol del maestro
resulta crucial desde esta perspectiva, pues es el responsable de poner en
contacto a alumnos y herramientas culturales, de crear situaciones de
interacción productivas entre ambos. El paradigma puede correr el riesgo de ser
interpretado como una reducción de todos los procesos mentales a la existencia
de una pertenencia dentro de un grupo social o puede llevar a suponer obligatoria
la utilización de herramientas culturales. Sin embargo, en este paradigma la
creatividad es un aspecto esencial de cualquier acto humano, pues los agentes
siempre tienen la posibilidad de utilizar una herramienta cultural específica
para alcanzar diferentes metas, muchas de ellas simultáneamente (Wertsch,
1998). En otras palabras, el que el aprendizaje esté intrínsecamente vinculado a la existencia de
un contexto sociocultural y herramientas asociadas no ha sido pretexto para
estudiar la creatividad y originalidad de los actos de alumnos y maestros.
Partiendo de los
elementos más relevantes de teoría sociocultural, donde se observa claramente
la importancia del lenguaje, las herramientas culturales y el contexto social
donde se desarrolle el proceso de aprendizaje cabe resaltar como todos estos
elementos permiten el diseño de
actividades pedagógicas centradas en la persona y que con el apoyo de todos los
recursos de la tecnología digital están encaminados al logro de objetivos
dentro del diseño Instruccional previamente elaborado por el maestro.
El paradigma
sociocultural permite el diseño de actividades pedagógicas mediadas por la
tecnología en la medida en que junto a este paradigma se coloquen en práctica
los elementos del modelo educativo centrado en la persona, a fin de poder conjugar
no sólo el diseño de actividades, sino su evaluación y la pertinencia de
acuerdo a los estándares y políticas institucionales y educativas que conlleven
a un proceso de aprendizaje exitoso.
Desde este
modelo educativo se tienen en cuenta seis círculos, así:
El estudiante
como eje central del proceso educativo, para que figuren como actores y sujetos principales de la acción educativa.
En segunda
instancia están los profesores, quienes diseñan el ambiente en el que se ha de
desarrollar el aprendizaje de forma cuidadosa, y haciendo la selección de
estrategias y técnicas que permitan el
desarrollo de las habilidades. Se podría que la actividad más importante de los
profesores está dada en el conocimiento que tenga de sus alumnos (diagnóstico),
diseño Instruccional de acuerdo a las necesidades y particularidades de los
estudiantes, facilitación o mediación del aprendizaje, evaluación y
retroalimentación de los estudiantes y la correspondiente reflexión sobre la
práctica, así como el uso adecuado de las TIC y ambientes de aprendizaje
basados en tecnología.
El tercer
círculo relaciona el área del conocimiento o disciplina, buscando la
aprehensión de fundamentos teóricos, que se expresen en el estado del arte de
cada tema, la investigación y las prácticas que sean necesarias en la
profesión.
Un cuarto círculo
hace referencia al contexto institucional, teniendo en cuenta la misión,
visión, políticas, normas y la propia cultura institucional desarrollada con el
tiempo y que diferencia la escuela de las demás. Así como los elementos
tecnológicos que se añaden al proceso de aprendizaje como complemento a la
enseñanza.
El quinto representa
el contexto sociodemográfico que rodea a la institución, el cual responde a las
necesidades que demanda la sociedad o el grupo social en particular.
El sexto
componente es el marco filosófico sobre el hecho educativo. Basado en
respuestas para preguntas del tipo para qué se educa, cómo debe ser este
proceso educativo, quienes son los responsables de educar, cuál es la responsabilidad
de los padres, la sociedad, del Estado con respecto a la educación de jóvenes y
niños.
Con todos los elementos
presentados del paradigma sociocultural y del modelo educativo centrado en la
persona, algunas sociedades se han convertido en pioneras del desarrollo de
estrategias educativas que mediadas por la Tecnología Digital permitan la
incorporación de programas educativos encaminados al mejoramiento continuo de
la sociedad en el marco del trabajo desde y hacia el desarrollo individual y
colectivo, formando en competencias que permitan al individuo ser cada vez más
competitivo en un mercado donde las exigencias son cada vez mayores y las
oportunidades muy pocas.
En la medida que la
sociedad y la cultura van cambiando, de igual forma los procesos pedagógicos se
deben ir transformando, permitiendo de esta manera el equilibrio que conlleve a
la formación de individuos competentes y capaces de interactuar con los cambios
que se van dando en su entorno.
El desafío prioritario
es aprender de los demás, pero debemos escucharnos caminando.
No podemos esperar a
conocer hasta la última letra para avanzar, lo urgente es compartir algunas
palabras, algunos objetivos y tener la apertura y el tiempo para conocernos más
y mejor, en la marcha y el trabajo diario.
Néstor
Novelli
Alanís Gonzáels, M.,
Manejo de la introducción de la innovación tecnológica en educación.
Fernández Cárdenas,
J.M., Las tecnologías de la información y la comunicación desde la perspectiva
de la psicología.
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compromiso y realidades.
Fernández Cárdenas,
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interinstitucional.










